COSTA DA MORTE.

Sepulcro de barcos y hombres, playas salvajes, acantilados practicados por muy pocos, días grises, vacas que campan a sus anchas por la carretera , mar de fondo, mezcla de salitre y piedra, historias transmitidas oralmente alrededor de lareiras, gentes tranquilas y afables ligadas al mar desde tiempos pretéritos…. Esto es para mi “A Costa da Morte” tierra de robalizas.


Hacía tiempo que no iba de pesca así que organizamos una escapadita a la Costa da Morte, las condiciones eran buenas: mar de fondo de dos metros del NW y vientos bonancibles del sur, por delante tres días de pesca y como único limite el Atlántico.


Las vistas desde el apartamento. Esa noche la lluvia pudo más que las ganas de pescar.


Al amanecer nos acercamos a la playa de O Rostro, el mar estaba precioso, salieron dos robalizas a spining y un sargo a fondo.


Dos para la sartén…


Y una devuelta al mar.



Por noche lo intentamos a fondo pero pronto abandonamos la playa, una solitaria chasca pudo menos que las ganas de cenar y coger la cama.


El segundo día, viendo la gran cantidad de algas que había en los pesqueros nos decantamos por Nuestra Señora de la Barca en Muxia, generalmente libre de basura.


La pesca de esa mañana. Algunas maragotas y un sargo de kilo.


Curioso cartel. Al anochecer lo intentamos en Nemiña en las proximidades de la desembocadura, sólo salió una chasca, otra vez nos retiramos pronto…



Manolo “O Pesco”, posiblemente la persona que más sabe de pesca de la comarca, se ha ganado la vida con una caña en las manos, para más tarde comprarse una barca. Entre muchas historias me contó que hace muchos años en la Playa de Mar de Fora en un lance con la red cogieron tantas lubinas que al nadar en la misma dirección hundieron la barca, como pudieron llegaron a tierra recuperando la red y parte de la pesca.


Su hijo Amador, percebeiro, pescador y buen heredero de los conocimientos de su padre. Vive en la playa de Nemiña desde que nació.


Apo pensativo en la boleira, después de coger una lubina a fondo con navaja.


Emilio y Morito, compañeros inseparables de fatigas. Lo bien que vive este perro.


Alfonso tras practicar una traqueotomía, se trago el Z-CLAW entero.


Mirando las olas me acordé de lo que siempre dice Fermín: con algas en el mar lo mejor son los paseantes, aunque no tengo mucha fe en ellos probé y este fue el resultado.


Vestigios del Prestige, sin comentarios.



De los tres días me quedo con la compañía, la comida y el mosqueo de que los robalos no acudiesen a la cita, quedan emplazados para la siguiente.
La foto de familia, bueno falta Morito.

Hasta la próxima paseantes.


Texto y fotos A.M.A.

Quiero aprovechar para dar el pésame a familiares y amigos por la desgracia ocurrida en O Carreiro de Aguiño.. http://www.lavoz.es/galicia/2009/10/28/0003_8067821.htm